El trabajo Auto (retrato): apuntes sobre el Alzheimer, compuesta por dibujos de pequeño formato realizados por la madre de la autora, se centra en el proceso degenerativo del mismo y su duelo a través de su reflejo mediante el proceso creativo.

En un estado avanzado de la enfermedad, en la que las obsesiones compulsivas, la drástica reducción de las capacidades cognitivas de memoria y de habla, entre otras, hacen que la relación materno-filial sea compleja. La autora incluye dentro de otras rutinas con su madre la elaboración de un retrato en el que ésta posa para su progenitora. La serie de ilustraciones surge como un proceso comunicativo entre madre e hija, donde la actividad lúdica permite generar una situación divertida y relajada en la que ambas conectan durante unos minutos. La idea del proyecto se inicia después, tras un largo periodo, en el que la acumulación de resultados, de ilustraciones divertidas y fallidas a su vez, componen un reflejo del proceso de enfermedad y la oscilación drástica en la manera de ver el mundo (y a su hija) de la madre y a su modo de representarlo mediante estilos y visiones absolutamente diversas en un lapso breve de tiempo.

Gracias al sujeto elegido en las ilustraciones, se muestra la otra cara de la enfermedad, que no es otra que el cuidador y sus seres queridos, frecuentemente invisibilizados y que deben adaptarse a los constantes cambios cognitivos, físicos y emocionales del enfermo, tal y como muestran los dibujos.